La colegiación en un colegio profesional no solo es un requisito legal para muchos profesionales en España, sino que también puede proporcionar beneficios fiscales significativos. En el marco del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), los colegiados pueden aprovechar la deducción por las cuotas de colegiación, reduciendo así su carga tributaria.
¿Qué es la deducción por colegiación?
La deducción por colegiación permite a los profesionales deducir las cuotas pagadas a un colegio profesional reconocido en su declaración de IRPF (tanto en la opción de ingresos de actividades realizadas por cuenta propia, como en el caso de rendimientos del trabajo realizados por cuenta ajena). Esta deducción busca reconocer y compensar los gastos asociados con la pertenencia a un colegio que respalda y regula el ejercicio de la profesión.
Requisitos para la deducción:
- Colegiación válida: Es necesario estar colegiado en un colegio profesional reconocido por la normativa vigente. La colegiación debe ser válida y en línea con los requisitos específicos de la profesión.
- Relación directa con la actividad profesional: Las cuotas que se desean deducir deben estar directamente relacionadas con el ejercicio de la actividad profesional del contribuyente.
Pasos para aplicar la deducción:
- Obtener las facturas correspondientes a la deducción practicada, disponibles en tu zona privada de la web (en la sección Intranet, después eligiendo “Facturación”, en el menú lateral, y eligiendo el año).
- Incluir las cuotas en la declaración de IRPF: En el momento de completar tu declaración de IRPF, identifica las cuotas de colegiación pagadas y úsalas como gastos deducibles.